La pandemia ha convertido muchas de nuestras prácticas empresariales en obsoletas. Desde el flujo de trabajo a las técnicas de venta. Por lo tanto, la transformación digital ya no es una estrategia que “está bien tener” si no un punto clave para la supervivencia de un negocio. Con la tecnología adecuada, las compañías pueden retomar aspectos esenciales perdidos durante este periodo.

Si se hace de forma correcta, la transformación de tu negocio hará que seas más competitivo y que puedas captar y mantener a más consumidores. La transformación digital te puede proveer de nuevos canales de distribución, nuevas formas de captar clientes, reducir costes, mejorar la productividad o llegar a tus metas empresariales más allá de la  supervivencia.

La transformación digital sólo puede ocurrir mediante la orquestación cuidadosa de diferentes capacidades organizativas que sirvan a la misión, la visión y los objetivos comerciales de una organización. Para adoptar nuevas formas de hacer las cosas, como trabajar con nuevas tecnologías, tu cultura corporativa debe estar abierta a la experimentación y al error.

Los objetivos de transformación ideales son: mejorar la experiencia del cliente digital y del usuario final para mejorar la lealtad, los ingresos y la retención; y transformar el proceso empresarial para reducir los costes, aumentar la productividad, integrar a los partners del canal de suministros y distribución y diferenciar las ofertas.