«Dribbblear» o diseñar para diseñadores, cuando piensas más en lucirte que en el proyecto global.
Puede ser que a lo largo de tu carrera te hagas una serie de preguntas ¿Diseño para otros diseñadores? ¿Para el cliente? ¿Para su público? ¿Para posibles directores de MK que quieran contratar mis servicios? y muchas más…
Entonces…¿Para quién diseñamos?
No hay una respuesta sencilla, porque depende del momento en el que estés como diseñador. Si eres un estudiante, querrás lucir potencial, si eres junior combinarás “dribbbles” con trabajos reales y si eres senior, tendrás que ser capaz de venderte con tu trabajo real.
Así que todas esas preguntas me han surgido en más de una ocasión a lo largo de mi vida laboral. Veía muchas veces diseños de Dribble que realmente me parecían fascinantes y que yo creía que con mucha facilidad podía llegar a ese nivel. Pero luego al hablar con desarrolladores / clientes. Pasaba un poco lo de siempre. ¿Realmente sirven para la estrategia de mi cliente? ¿Una pieza bonita está por encima de la experiencia de usuario, el mensaje o el coste en desarrollo?
Siempre tenemos que estar al servicio de la estrategia de la marca, esta estrategia ya tiene que tener en cuenta todos los inputs necesarios para realizar el proyecto.
Muchas de las pantallas o trabajos más espectaculares de Dribbble o Pinterest los veremos siempre como imagen o vídeo y muy raras veces programadas de verdad. Esto se explica en estos tres puntos:
01. La mayoría están diseñadas para escritorio Full HD
Un gran problema de base en el que se usan grids creativas y no de bootstrap pensando en ver la web de manera espectacular en escritorio, sin pensar en que cada vez más el público está en móvil. Muchas de estas webs si se acabarán desarrollando tendrían problemas en la versión móvil. No solo por las animaciones sino por todo el contenido. Y si muchas de ellas son landings de producto, aún tendríamos otro problema mayor, ya que estas deben resolverse, sí o sí, para convertir en móvil.
02. El alto coste de su desarrollo
Animaciones, diseños complejos… Todo esto hace que los tiempos de desarrollo se multipliquen de forma exponencial. Contra más detalles más tiempo de desarrollo y lo importante de todas estas páginas al final es que “conviertan” que sean eficaces y no un espectáculo o lucimiento del diseñador.
03. No tienen que lidiar con el contenido o exigencias reales del cliente.
Vamos que son lo que se llama “un trucho”. Llega un punto en el que te das cuenta que el gran reto que hay detrás de un proyecto es conseguir satisfacer las necesidades de todas las partes con todas las partes implicadas en un proyecto. Qué responda a la estrategia del cliente, que cumpla los requisitos de experiencia de usuario en base los “user persona”, ajustado al contenido SEO, preparado para las campañas SEM, que sea de carga rápida y un largo etc. Todo esto es muy difícil de conseguir y de ahí que sea el verdadero reto.
Conclusión
Vamos que son lo que se llama “un trucho”. Llega un punto en el que te das cuenta que el gran reto que hay detrás de un No digo que haya que dejar de hacer truchos, pero sí que es verdad que nosotros, como estrategas en primer término y diseñadores en último, tenemos que pensar en lo mejor para el cliente. Y va a ser muy raro la ocasión en la que vamos a poder fusionar altos presupuestos con un desarrollo enorme y un cliente dispuesto a asumir riesgos. Así que, para los estudiantes veo perfecto que caigan en “Dribbblear” pero llega un punto en que como profesionales tenemos que anteponer las necesidades y estrategias del cliente a nuestro propio lucimiento, por mucho que nos pese a veces.
Comments are closed.